En Sevilla este verano un grupo de jóvenes hemos compartido nuestra alegría y energía con niños del Polígono Sur, dónde hay una comunidad de religiosas de Jesús-María viviendo con Pasión cada día del año.
Ha sido una experienca única: ¡Cuánta vida, cuánto que aprender, cuánto que agradecer!
Nos vamos llenos de vida y con ganas de repetir…
“Al final de esta experiencia me encontré con que todo lo que había hecho me parecía insignificante comparado con todo lo que había aprendido de las personas que pasaron por mi camino, tantas historias, tantas duras realidades. Y también tanto amor, ¡amor por un tubo! Lo recomendaría a cualquiera que tenga ganas de dar lo mejor de sí mismo, con la mente y corazón bien abiertos a todo lo que va a vivir.” (Alba Urríes, 2016)